sábado, 10 de enero de 2009

Qué azul está el cielo

Acabo de renunciar a la ensalada más vomitiva que pude haber hecho últimamente.

Como me desperté un poco tarde, andaba bien starving buscando comida por todos lados, pero simplemente no se me antojaba nada y menos el pollo asado que trajeron para la comida. Odio el maldito pollo asado, en verdad que si pudiera eliminaría eso de mi mesa los fines de semana, cada vez que lo veo me siento bien cavernícola, la única diferencia es que ahora tenemos mesas de madera, sillas y platos. No me encanta, no me divierte nada.

Entonces dije Si señor hay que inovar en la vida, y me puse a sacar todos los ingredientes para una ensalada. Saqué lechuga y tomate, verduras de esas que vienen congeladas brócoli, coliflor, zanahoria y elote, y dije oOk ok quiero algo de pollo. Y m e encontré en el refri una combinación de pollo a la cordonblue, nuggets y pechuga entonces lo caliento y lo parto en pedazitos, agrego croutons a mi ensalda ydije pero qué maravilla ven mis ojos. Puse aderezo mil islas porque no había César y también le puse una cosa italiana que más bien era puro aceite de oliva con minimugritas.

Y dije Amm.. qué rico...
Pero no ;(. Me arrepentí desde el primer bocado. Pero pensé que no sabía mal, pero tampoco estaba muyy bueno esto.
Todo empeoraba cada vez más, entonces decidí abortar la misión.

No quise sufrir porque ando con el lema de que la vida es para los placeres.
De quién es esa filosofía?

He vuelto. (6)